No sé si yo iba cumpliendo mi condena
o mi crimen fue proscrito…
pero a la segunda copa
tu silueta se dibujaba pasando por mi vida…
No había nada que decir eras mi tipo
de mujer,
de tu veneno podía beber
Y pedir más lujuria al amanecer.
Podría escribirte un verso enamorado,
esos que resuenan siempre,
escritos por poetas amanerados…
Pero tu sonrisa de verdad,
esa que escondes entre tanta
mediocridad,
no merece tal insulto
y por eso decidí
escribir solo para ti.
Hay gente que vive de fantasías,
de cultura pasajera,
amoldando la verdad
a su bienestar y la realidad,
el amor es intelectual
y la mentira su amante irreal…
Pajera caminata,
recorrer los caminos del pasado,
el tiempo pasa y no volverá,
pero cometemos el pecado
de ser siempre como somos…
Algún día volveré a la habitación
donde te deje
y buscare la forma de mutar
a tu parecer,
amor no pierdas la esperanza,
algún día volveré
a ti
y seré lo que debo ser…
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